Este juego es especial para nosotros. En un principio trabajamos con los desarrolladores de Bread Team para publicar un simpático juego en el que tenías que cortar ovejas a la mitad. Era un juego caprichoso, matemático y sorprendente. Disfrutamos tanto trabajar con Bread Team que comenzamos a desarrollar otro juego inmediatamente después de terminar el primero.
Fue un proyecto totalmente centrado en la exploración. Durante el proceso de desarrollo vivimos de todo: tres prototipos, un matrimonio, un segundo hijo y estalló la guerra en la región donde vivían los miembros de Bread Team. Fue así como se creó Phantom Trigger. Por una parte, Victor Solodilov se dedicó a aprender a programar con código en C# mientras trasladaba a su familia al este de Ucrania; por otro lado, Denis Novikov experimentaba con el arte de píxeles mientras se mudaba a San Petersburgo. Nuestro equipo en tinyBuild trabajó con ellos para idear y hacer la producción que finalmente trajimos a Xbox One.
Un elemento que nos llena de emoción es la integración con Mixer. Los streamers y creadores de contenido son nuestro motor principal en tinyBuild, ya que siempre nos han echado porras y han sido unos fans increíblemente generosos. No hay un solo día en el que no estemos ideando formas para hacer que nuestros juegos sean más gratificantes para ellos. En Phantom Trigger incluimos maneras de hacer que la audiencia finalmente se integre al juego.
Hemos dicho que Phantom Trigger es un juego difícil y no bromeamos. Tendrás que dominar a la perfección el manejo de tres armas y de un sistema de combos cuando luches contra un sinnúmero de demonios neón, de otra forma, morirás. Afortunadamente, les hemos dado a los espectadores una manera de ayudarte: ahora podrán curarte y subir el nivel de tus armas. En cambio, si el juego te parece demasiado fácil, entonces ¡podrán crear enemigos! Porque de esto se trata el internet, a veces simplifica tu vida y otras, la hace más desafiante. Encuentra Phantom Trigger en Tu Tienda Microsoft (Argentina, Chile, Colombia y México)
¡Felices cortes!